Felipe Zambrano, dramaturgo y socio de ATN: “Confío en que, a medida que se consoliden las estructuras de asociaciones como ATN, los autores se sentirán cada vez más respaldados y reconocidos por su labor creativa, contribuyendo al fortalecimiento de la cultura y las artes en el país”.
El proceso creativo de la obra “Historia de amor para un alma vieja” parte desde una experiencia familiar maravillosa, en donde este destacado dramaturgo y actor, no sólo brinda un homenaje a su bisabuelo, sino que convierte esta pieza teatral en una exploración del perdón, el amor y la reinvención en la tercera edad, logrando conectar emocionalmente con todo tipo de audiencias.
Así nos cuenta Felipe: “Mi bisabuelo tenía una gran amiga extranjera que lo llamaba todos los días. Siempre sospeché que estaban enamorados, pero nunca se lo confesaron. Nunca lo sabré. Una tarde, presencié una conversación telefónica de ambos, donde entre broma y broma perdieron la noción de la realidad. Eso me impactó, porque iba más allá de ellos. Tenía relación con la pérdida de la memoria a corto plazo. Me pareció interesante plasmar ese conflicto en una dramaturgia de carácter familiar”.
Así, junto a la partida de su bisabuelo, se inicia el camino de esta obra, en donde pareciera que ambas situaciones se cruzan para construir la magia del destino. “La obra fue escrita y postulada al concurso de dramaturgia Jorge Diaz en julio. Mi bisabuelo murió el 1 de agosto. Dos semanas después me informan que había ganado una mención honrosa con la obra. Fue una hermosa e inconsciente transformación de la tristeza por la pérdida, en una pieza de arte y una forma de honrar la memoria de mi bisabuelo, creando una dramaturgia inspirada en ciertos aspectos de su vida y la importante relación “fraternal” que tuvo durante toda su edad adulta”, agrega Felipe.
Los personajes que dan vida a la obra están encarnados por actores que, por su edad y experiencia, reflejan la profundidad de los diálogos intergeneracionales que la historia plantea. Eduardo Barril, a quien el autor considera un amigo cercano, fue elegido para interpretar un personaje inspirado en su propio bisabuelo, mientras que Luz Jiménez, con su natural candidez, aporta una sensibilidad excepcional a su personaje. Junto a ellos, Colomba Larraín y Pascale Zelaya completan un elenco que ha logrado enriquecer y profundizar la propuesta dramatúrgica.
“Historia de amor para un alma vieja” se estrenó en octubre de 2022, en el Centro Cultural Gabriela Mistral (GAM), en el marco del Festival FAMFEST, tras haber sido presentada como una lectura dramatizada en 2021 en Mori Bellavista, durante la premiación del III Concurso de Dramaturgia Jorge Díaz. Posteriormente, ha recorrido diversos escenarios a lo largo de Chile, desde los Temporales Teatrales en Puerto Montt hasta presentaciones en comunas como Peñalolén, Quilicura y La Pintana, logrando una extraordinaria conexión con el público debido a su universalidad y a su enfoque sobre temas cercanos a todos, como el amor y la vejez. En enero de 2024, la obra fue parte del prestigioso Festival Santiago a Mil, donde se destacó la trayectoria de Luz Jiménez, una de las actrices más queridas y respetadas de Chile.
El éxito de la obra no solo radica en su temática, sino también en la conexión emocional que establece con los espectadores. Para Zambrano, todas las personas han experimentado de alguna manera la relación con sus abuelos y abuelas, lo que hace que la obra resuene en lo más profundo del corazón de su audiencia.
El dramaturgo, que comenzó su carrera en la actuación y posteriormente se dedicó a escribir, destaca que la escritura le ha permitido mantener activa su creatividad durante tiempos difíciles, como la pandemia. Sin embargo, no reniega de su amor por la actuación, un arte que sigue siendo fundamental en su vida y que nutre su faceta como escritor. Para él, actuar y escribir son dos oficios que se complementan y que le permiten desarrollar personajes que cobran vida en manos de actores y actrices con los que sueña trabajar.
En cuanto a los derechos de autor, considera que en Chile aún es un desafío que éstos sean plenamente reconocidos, pero resalta la labor de organizaciones como ATN, que protegen y valoran el trabajo de los creadores. “Confío en que, a medida que se consoliden las estructuras de asociaciones como ATN, los autores se sentirán cada vez más respaldados y reconocidos por su labor creativa, contribuyendo al fortalecimiento de la cultura y las artes en el país”.
«Historia de amor para un alma vieja» sigue su camino, con próximas funciones programadas en Ovalle y con la esperanza de continuar recorriendo Chile. Para el autor, esta es una obra que siempre podrá volver, pues su historia, al igual que el amor y la vejez, es eterna y universal.